- El músico, compositor y actor reconocido por sus aportes a la música popular y de protesta, falleció la tarde de este jueves 30 de abril
CDMX.- Óscar Chávez, considerado uno de los máximos exponentes de la trova y la música tradicional mexicana, falleció este día en la Ciudad de México y deja huella en los jóvenes de la década de los sesenta con canciones como Por ti e, incluso Macondo, con la que invitó a volar al lado de sus mariposas amarillas.
La Secretaría de Cultura y el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL) lamentan el deceso del cantautor nacido en 1935, quien estudió en la Escuela de Arte Teatral del INBAL y en la Universidad Nacional Autónoma de México.
En su cuenta de Twitter, la secretaria de Cultura, Alejandra Frausto Guerrero, anunció la partida del artista: “Una voz de lucha nunca se apaga, gracias, Óscar Chávez, tu vida fue un viaje digno de ti. Mi más sentido pésame a sus familiares, amigos y compañeros de lucha y canción ¡Viva Óscar Chávez!”
En las últimas décadas del siglo pasado, Chávez se dedicó al rescate de las tradiciones populares en la República mexicana y fue reconocida su labor con el Premio Nacional de Ciencias y Artes en el área de Tradiciones Populares (2011).
Oscar Chávez, además de compositor, participó en la cinta Los caifanes. Como actor fue dirigido por Héctor Mendoza, Ludwik Margules, Luis Alcoriza, Juan José Gurrola y Juan Ibáñez, entre otros, aunque su mayor reconocimiento lo obtuvo en el ámbito musical.
Fue uno de los máximos exponentes en el país del movimiento musical, folclorista y de protesta latinoamericano conocido como Canto nuevo o Nueva canción.
Entre su amplia discografía, con más de un centenar de discos, destacan Herencia Lírica Mexicana, los tres volúmenes de la serie Voz viva de México (en el cual recita poemas de Sor Juana Inés de la Cruz, Gilberto Owen y Amado Nervo), sus interpretaciones con Guillermo Velázquez y los Leones de la Sierra de Xichú y el Trío Los Morales, sus Parodias Políticas, los inolvidables discos de Macondo y Los Caifanes, y Cuento de Navidad, farsa teatral de Emilio Carballido, entre muchos otros.
Entre los recintos donde llevó a presentarse destacan el Palacio de Bellas Artes en 1973, convirtiéndose en uno de los primeros cantantes de música popular en presentarse en el recinto de mármol. En tanto, el Auditorio Nacional y Ciudad Universitaria fueron escenarios obligados al que acudían sus seguidores cada año.
A lo largo de su trayectoria, se presentó con otros músicos aclamados como Chamín Correa y la Internacional Sonora Santanera, y en múltiples espacios tanto nacionales como internacionales —en Argentina, España, Cuba, Estados Unidos y Chile, por mencionar algunos países.
Óscar Chávez se destacó además por su labor como investigador y difusor de la música tradicional mexicana. Sus producciones comprenden géneros de diversas regiones del país: Oaxaca, Chiapas, Veracruz, Guanajuato, Guerrero, Nuevo León, Yucatán y Ciudad de México, retomando desde corridos ferrocarrileros hasta trova latinoamericana, música española, temas infantiles, tango, bolero y festividades como la Navidad y el Día de Muertos.
Cabe señalar que la Fonoteca Nacional resguarda desde 2017, el fondo documental sonoro personal de Chávez, en el que quedan documentados sus 50 años de carrera, así como su faceta de investigador de la música tradicional de México y otras partes del mundo.
Este acervo cuenta con 383 documentos—entre casetes, discos analógicos, discos compactos, cintas de carrete abierto y otros materiales audiovisuales— con entrevistas, producciones musicales y grabaciones en vivo; además de una amplia cantidad de materiales, como libros, folletos, catálogos, partituras y más, que complementan la documentación de la vida y obra del músico.
Su repertorio está integrado por bagaje amplio, vinculado también a movimientos sociales y políticos, como el del 68 y la lucha del Ejercito Zapatista de Liberación Nacional (EZLN).
Chávez recuperó canciones de compositores inmortales como Chava Flores o Rafael Elizondo y difundía temas de autores como Pancho Madrigal, incluso participó al lado de cantantes de otras generaciones, como el grupo Panteón Rococó y seguía dedicado a la creación de nuevos temas, señaló Ana Valentina López de Cea en su texto Óscar Chávez, 83 años de canto inquebrantable.
Carlos Monsiváis resumía en su texto Óscar Chávez, el relajo liberador, el trabajo de décadas de este artista: “Desde hace años, Óscar Chávez —cantante, compositor, folclorista, antólogo, luchador social— trabaja en una triple vertiente: rescate de la herencia lírica, presentación de nuevos materiales mexicanos y latinoamericanos, y manejo de las vetas satíricas de la canción. Él no jerarquiza, y si no le concede igual tiempo, sí le da igual importancia a lo viejo y lo nuevo, lo triste y lo divertido, lo épico y lo sensual”.
Como homenaje al “Caifán Mayor”, la Secretaría de Cultura y organismos que lo conforman compartirán parte de sus conciertos, audios y películas; por ejemplo, a las 20:00 horas de este jueves, la proyección del concierto que ofreció el pasado 2 de octubre 2019 en el Complejo Cultural Los Pinos, con motivo de la conmemoración de los 51 años de los trágicos hechos ocurridos en Tlatelolco, durante el movimiento estudiantil del 68. Esta transmisión será en la página Contigo en la distancia (contigoenladistancia.cultura.gob.mx).
Canal 22 también transmitirá ese mismo concierto el viernes 1 de mayo a las 22:30 h, mientras que el domingo 3 de mayo a las 17 h toca el turno del Concierto Festival del Centro Histórico 2016. Celebrando a Óscar Chávez y este jueves 30 de abril programará el documental Ardió, arde, arderá. Óscar Chávez, músico a las 22:30 h, que fue producido por Arturo Ripstein y Roberto Fiesco, y dirigido por Julián Hernández.